El responsable mundial de Google News, Richard Gingras, y el jefe comercial internacional, Madhav Chinnappa, han estado en Madrid a finales de septiembre. Han mantenido entrevistas y reuniones de trabajo con clientes, socios, periodistas, profesionales del sector…. Y se han visto con altos representantes de la Administración española, entre ellos, la secretaria de Estado de Comunicación, Carmen Martínez Castro, el de Comercio, Jaime García-Legaz o el de Telecomunicaciones, Víctor Calvo Sotelo. En esas reuniones los dos ejecutivos de Google sondearon las intenciones del Ejecutivo sobre una cuestión que ellos consideran fundamental para el negocio del gigante de Mountain View y sin la cual no se entiende el negocio de Google: la libertad para enlazar de forma gratuita contenidos que son públicos. No parece que salieran demasiado satisfechos de esos encuentros.
Google acaba de dar un golpe de mano en Alemania y está dispuesto a cerrar el servicio Google News en España si la Ley de Propiedad Intelectual (LPI) que se aprueba mañana en el Senado le obliga a pagar a los editores por los contenidos de las webs que enlace a partir de ahora. Sería el primer país democrático del mundo en el que la compañía fundada por Larry Page y Sergey Brin cerrara su popular servicio.
El problema radica en el artículo 32.2 de la LPI, que establece elpago irrenunciable de un canon por parte de los agregadores de noticias a los editores de contenidos como compensación por el uso de los mismos. Es lo que se ha denominado tasa Google, porque es el principal agregador del mercado, o canon AEDE, porque ha sido la Asociación que engloba a los editores de medio la principal impulsora de ese artículo. ¿Dónde está la discrepancia? Los editores dicen que Google y el resto de agregadores -también las redes sociales- se lucran enlazando los contenidos que ellos producen y que cuestan dinero. Contra esto, Google responde que News no obliga a ningún medio a estar en ese servicio.
El artículo 32.2 ha sido polémico durante toda la tramitación parlamentaria y ha generado muchas críticas. La más significativallegó desde la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que considera que el canon limita la libertad de empresa al crear una barrera de acceso a quienes quieran entrar en el mercado de los agregadores de contenidos. La CNMC cuestiona también que el cobro del canon se tramite a través de las entidades de gestión de derechos de autor. Además, Competencia recuerda que «existen soluciones técnicas, sencillas y gratuitas», que evitarían, si así lo desea el editor, los enlaces como «el fichero estandarizado robots.txt, cada propietario de una página web puede impedir o delimitar, fácilmente y sin costes, el rastreo de cualquier buscador y agregador de noticias con el grado de detalle que se desee».
¿A qué se debe, pues, las inversiones de los periódicos en mejorar el posicionamiento de sus webs en los buscadores, mediante SEO o SEM si, según sus responsables, cuanto mejor posicionado estés, más dinero pierdes?, se preguntaba la Comisión de Competencia. La AEDE, por el contrario, se ha negado a usar esta opción: «La realidad es que esto resulta inviable para cada uno de los editores de forma aislada. El mismo dominio de Google como buscador global haría que,si un editor decide no indexar sus contenidos en Google News, pondría en peligro la aparición de sus noticias en el buscador de Google, lo que es prácticamente decir adiós a internet. Por esto es importante la irrenunciabilidad al derecho de compensación». Y así está recogido en la LPI.
Google ya ha tenido problemas de este tipo en algunos países europeos pero en ningún caso se ha llegado al extremo de España. En Francia, por ejemplo, se alcanzó un acuerdo por el que Google pagó unos 60 millones de euros a los editores en concepto de inversión en el desarrollo digital de la prensa. El caso alemán viene de lejos. Allí, Google sólo indexa a los medios que se dan de alta voluntariamente en el servicio Google News porque la ley protege a los editores que no quieren aparecer. El último enfrentamiento se ha producido porque algunos periódicos han demandado al buscador por incluir fragmentos de texto e ilustraciones en los enlaces. La respuesta de Google ha sido inmediata: ya no muestra ni los resúmenes (snippets) ni las imágenes (thumbnail), en los resultados de búsqueda, sólo los enlaces y los titulares. Google dice que sirve a los medios alemanes 5.000 millones de visitas y estima que cada clic que proporciona genera unos 12 o 16 céntimos. Es lo que pueden perder esos medios.
No hay datos oficiales en España, pero el posible cierre de Google News podría suponer una sensible pérdida del tráfico de las ediciones digitales de los periódicos -del 10% en los grandes y casi el 30% en el resto-y de los ingresos que genera la publicidad digital. Pero al margen del daño económico que el canon pueda suponer para los medios, Google y los demás agregadores se quejan de los riesgos para la libertad de información que conlleva restringir el enlace en la era de internet.
Artículo de @vicentelozano